“Andan pregonando moral con la bragueta abierta”, dijo Giraudo en relación a lo ocurrido con la normalización de El Trapiche.
Ayer, durante el debate del proyecto de normalización de El Trapiche, el diputado José Giraudo, del bloque Sanluiseños por el Cambio, decidió contraatacar todas las acusaciones de ser oficialista que los legisladores del Frente Progresista Cívico y Social le vienen haciendo desde que, una vez más, logró imponer a Miguel Ángel Ferrero como miembro del Tribunal de Cuentas por la minoría, algo que fue luego judicializado por los radicales.
Para entender las acusaciones que ayer hizo Giraudo hay que recordar que fue el radicalismo el que propuso que se le quitara, al proyecto de normalización de El Trapiche, el carácter de muy urgente, así no quedaba aprobado de manera ficta si la Cámara de Diputados no lo trataba en dos semanas. Como el trámite requería los dos tercios de la Cámara, cosa que Compromiso Federal por sí solo no tiene, el radicalismo aprovechó el tiempo extra para lograr que el oficialismo aceptara incluir en el proyecto la creación del Concejo Deliberante de El Trapiche, algo a lo que se ha negado sistemáticamente, bajo órdenes del Ejecutivo, por años. Por su parte, el Gobierno utilizó este tiempo para bajar con todo su aparato y lavar la mala imagen que Gabriela Ciccarone había dejado en el municipio.
“Se buscó el escándalo mediático. Se le quiso hacer decir a la Constitución cosas que la Constitución no dice. Hubo un bloque de la minoría que mintió. Trató de generar un toma y daca con la situación de El Trapiche”, dijo Giraudo, quien nunca estuvo de acuerdo con que en el mismo proyecto de normalización se incluya la creación del Concejo Deliberante. “Es anexar un elemento objetivamente extraño a lo que la Constitución manda”, sostuvo el legislador
“¿Qué vamos a esperar? ¿Que renuncien sus intendentes?”, dijo Giraudo en relación a otros municipios que estarían en condiciones de tener su propio Concejo, insistiendo en que la creación de estos órganos se debe hacer a través de un proyecto de ley aparte. Y si bien lo que plantea Giraudo es cierto, también lo es que Compromiso Federal jamás aprobaría un proyecto semejante.
“Andan pregonando moral con la bragueta abierta”, dijo Giraudo, aumentando la apuesta, antes de denunciar que un diputado del Frente Progresista tiene empresas que “hace negocios con este Gobierno”.
Otro punto que lo tenía mal a Giraudo fueron declaraciones que efectuaron legisladores radicales uno de los días en que Compromiso Federal no dio quórum para tratar el tema de El Trapiche. Al respecto, los radicales habrían dicho que él faltó para no dar quórum. “Sepan esos imbéciles que salieron a difamar y a decir pavadas, sepan que yo, justamente ese día, choqué, tuve un accidente de tránsito”, les contestó Giraudo.
“Sanluiseños por el Cambio nunca tomó a la situación institucional de El Trapiche como rehén, como trofeo de guerra, como sí hicieron desde otra bancada. Nunca, desde este bloque, se generó un toma y daca como el que se generó desde un bloque de esta Legislatura”, dijo Giraudo.
“Este tema se debería haber aprobado el primer día, sobre tablas, porque el proyecto original no dice ni mas ni menos de lo que dice la Constitución. Si hubiéramos votado el primer día lo que dice la Constitución, hoy ya tendría intendente en funciones el Trapiche. El tema Trapiche fue tomado como botín de guerra por un bloque de este recinto. Negociaron, presionaron, extorsionaron, difamaron con el tema
Trapiche, le mintieron a la comunidad”, concluyó el diputado, quien, cabe destacar, nunca mencionó durante su alocución el nombre del Frente Progresista Cívico y Social, por más que las referencias eran más que obvias después de todo lo que ha transcurrido este año legislativo.
