“Justicia lenta no es justicia”, decía uno de los carteles de las compañeras de las víctimas que ayer fueron al Poder Judicial.
Ayer, en horas de la mañana, comenzó el juicio oral en la causa “Jofré Julio César (Imp.) – Brancal Yesica y otros (Dam.)- Av. Homicidio y lesiones culposas”, más conocida como “Zanjitas”, en la Sala de Juicios Orales Nº 2 de la Primera Circunscripción Judicial. El Tribunal está integrado por Hugo Guillermo Saa Petrino como presidente, Gustavo Miranda Folch y José Luis Flores. Como Fiscal de Cámara, interviene Fernando Rodríguez, Rina Mercau como defensora de Menores, mientras que los abogados de Jofré son Natalia Sarmiento y Marco Juárez.
Previo al comienzo, familiares y, principalmente, amigas de las chicas fallecidas, heridas o mutiladas en el accidente coparon la explanada del Poder Judicial, portando carteles con consignas como “justicia lenta no es justicia” y pidiendo que paguen los culpables, refiriéndose no solo al chofer que está siendo juzgado, sino también a la empresa Polo y el colegio Santa María.
Tras un repaso del hecho, el agente fiscal solicitó que se condene al imputado a sufrir la pena de 4 años y 8 meses de prisión, más accesorias de inhabilitación especial para conducir automotores por el término de 10 años y costas procesales, “por encontrarse incurso en homicidio y lesiones culposas en concurso ideal agravado por la pluralidad de víctimas y la conducción imprudente, negligente e inexperta de un automóvil”.
Por su parte, los defensores de las víctimas (Carlos Salomón, José Luis Dopazo, Claudia Rocha, Néstor Nóbile y Jorge Rubén Sosa) adhirieron al pedido de Fiscalía.
Por su parte, el abogado Héctor Zavala Agüero solicitó que se recepte el testimonio en Cámara Gesell de su representada, la menor Eva del Cielo Zavala Pereyra, y que se incorpore como prueba un soporte digital con fotografías, en virtud del principio de aptitud probatoria. Además, pidió que se agregue como víctimas de lesiones a Patricia Casas, María Eva Santucho y Eva del Cielo Zavala Pereyra.
Luego de un cuarto intermedio, el Tribunal hizo lugar al pedido de incorporación de la prueba, a la solicitud de declaración en Cámara Gesell y que se consideren como víctimas de lesiones a Casas y Santucho. En cuanto al material fotográfico y no habiéndose dado argumentación, el Tribunal resolvió que se justifique la novedad de la prueba ofrecida.
Posteriormente, el Tribunal le preguntó a Jofré si quería prestar declaración, pero el acusado expresó que se remitiría a la declaración indagatoria efectuada en la etapa de instrucción. Acto seguida, la secretaria de Cámara dio lectura a la referida declaración.
En la misma, Jofré manifestó que el día del hecho, cuando finalizó el recorrido de la fábrica, alrededor de las 9 de la mañana, le avisaron que debía realizar un viaje a una escuela que estaba ubicada pasando la localidad de Zanjitas. Debido a que desconocía el recorrido, le solicitó al párroco que acompañaba a las alumnas que lo guiara para llegar al establecimiento.
Durante el viaje, antes de llegar al segundo paso de nivel, sobre la curva, había un cartel que indicaba la velocidad máxima de 40 km/h. En ese itinerario, el sacerdote se le adelantó en el cruce de las vías, mientras que él intentó disminuir la velocidad. Es allí donde el colectivo se detuvo y advirtió que el tren estaba muy próximo, por lo que colisiona con el rodado y es acarreado por unos metros. “Yo fui despedido por la ventanilla y a partir de ahí, no recuerdo nada más”, sostuvo Jofré.
El juicio oral continuará el día de hoy, 9 de septiembre a las 9.30 hs. Cabe recordar que se ha previsto la declaración de
77 testigos durante el desarrollo del debate, por lo que se espera que sea un largo proceso.