[dropcap style=”circle”]L[/dropcap]os titulares de la la Unión de Trabajadores de la Educación Provincia de San Luis (UTEP) y el Sindicato de Empleados Provinciales (SIEP) dieron sus opiniones sobre el aumento salarial del 21% que anunció en la tarde del jueves el Gobernador y que totaliza una suba del 81% en lo que va de 2022 para los salarios de los trabajadores públicos provinciales. Según los datos de septiembre, la inflación interanual en San Luis es del 83,4%.
“Refleja el pedido que hemos hecho los sindicatos. En un tiempo complejo de inflación, necesitamos que el salario no quede por debajo de la misma. Era importante y necesario, pero los gobiernos deberían tomar algún tipo de medidas porque este aumento que les entra a los trabajadores termina en el bolsillo de las empresas que fijan los precios y que últimamente se han dedicado a especular. Tenemos una recomposición salarial y ya están remarcando en el supermercado. No alcanza con no quedar por debajo de inflación, sino que necesitamos políticas de control o establecer con las empresas de alimentación que no te remarquen de esta forma. Es muy serio este proceso inflacionario”, analizó la secretaria general de UTEP, Soledad Correa en una entrevista con La Gaceta Digital.
La gremialista contó que ayer fueron convocados por la ministra de Educación, Eugenia Cantaloube, y les manifestó que el Gobernador ya estaba en conocimiento el pedido salarial que hicieron los sindicatos la semana anterior. Horas después se hizo el anuncio de incremento salarial. Correa manifestó estar conforme con el porcentaje anunciado ayer porque era lo que se estaba pidiendo.
Respecto a lo educativo, Correa reveló que la ministra les dijo que los convocará la semana que viene para avanzar en cuestiones de la materia. La secretaria reiteró que su preocupación en el “sistema paralelo” donde se emplea a docentes contratados como monotributistas y que al finalizar cada ciclo lectivo son despedidos. “Estos colegas el aumento no les llega. Se hace complicado continuar con el diálogo Están muy precarizados, sin derechos”, consideró.
Otro punto de vista sobre la suba salarial es el del titular del SIEP, Rubén Nemzoff. “Todo lo que le llega al trabajador que necesita una recomposición, es bienvenido. Si bien no es lo que estábamos solicitando, destacamos que esta vez fuimos convocados antes de los anuncios, y se quedó que después de fin de mes, seguir hablando. Nos vamos a seguir juntando para arreglar porque no es lo que pedíamos. Esto no nos conforma porque primero había que establecer un piso para que ningún empleado público cobrara menos de lo que es la línea de pobreza”, comenzó analizando.
Los sindicatos pretendían que se incorporara una suma fija al salario de los trabajadores para que pudieran superar la línea de pobreza, según contó Nemzoff.
Según el sindicalista, más del 50% de los empleados públicos provinciales están por debajo de la línea de pobreza que actualmente está en $128.214,11 para una pareja con dos hijos.
“La única categoría que supera la línea de pobreza es la A. Todas las otras categorías están debajo. Con este incremento, una categoría F (la más baja) se va a menos de $95.000. Está muy lejos de la línea de pobreza”, afirmó Nemzoff a La Gaceta, y agregó los los empleados de categoría A pasarían a cobrar $150.000.
Otro dato que reveló el gremialista que el salario promedio de los 1.500 funcionarios del Gobierno está “arriba de los $300.000. El más bajo está en $300.250 y el más alto en arriba de los $500.000”.