Polémica por el nombre que se le puso a la ex estación de trenes

Hubo dos posturas enfrentadas. La del municipio encarnada en el concejal Germán Ponce contra la su par José Luis Dopazo, hijo del homenajeado.

El Concejo Deliberante aprobó por amplia mayoría el proyecto de ordenanza para que el centro cultural que se inaugurará en la ex estación de trenes lleve el nombre del ex intendente José Rafael Dopazo. La polémica radica en que la Municipalidad no quiere que se bautice con ese nombre el edificio porque afirma que el ex intendente fue una de las personas que firmó la carta al genocida Emilio Eduardo Massera. Por lo tanto es posible que se vete la ordenanza.

En uno de los pasajes de la carta de 1978 se pidió a “nuestras autoridades, la investigación exhaustiva y en su caso el castigo ejemplar, de eventuales negociaciones realizadas en perjuicio del Estado y vinculadas a organizaciones subversivas”.

El concejal Germán Ponce fue el vocero encargado de manifestar en el recinto la postura del Ejecutivo Municipal en contra de llamar José Rafael Dopazo al centro cultural, iniciativa que surgió del edil radical Francisco Guiñazú.

Luego, el concejal José Luis Dopazo, hijo del ex intendente, hizo uso de la palabra. No se refirió a la cuestión de la carta pero puso de manifiesto la contradicción del intendente Enrique Ponce.  El edil relató que en 2003, a raíz del fallecimiento de su padre, Ponce lo llamó en calidad de secretario de su padre quien era intendente capitalino en ese entonces. Se hizo el ofrecimiento de velar a José Rafael Dopazo en la Sala de Situación de la Municipalidad. También recibió el llamado de Carlos Sergnese, presidente de la Cámara de Diputados, quien ofreció el recinto como lugar de velatorio, ya que Dopazo padre también fue presidente de Diputados.

“Decidimos aceptar la invitación de la Municipalidad. Fue el primer intendente que se veló en la Sala de Situación. En aquel momento no dijeron nada de lo que están diciendo ahora. Nos sentimos muy agradecidos por el gesto de reconocer a mi viejo, un hombre del municipio, un hombre de la democracia”, expresó en parte de su alocución Dopazo.

El ex intendente Dopazo fue electo en 1973 por más del 50% y a los 36 años se convirtió en el intendente más joven del país en aquella época.

La ordenanza fue aprobada por 10 votos contra 1. Como era previsible el único voto negativo fue del joven Ponce. Una vez aprobada la ordenanza, los concejales se levantaron de sus bancas para saludar a Dopazo, salvo el hijo del intendente que permaneció sentado.

 

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