Dijo el abogado defensor del ex jefe de Policía Guillermo Valdevenitez con respecto a la “denuncia” por acoso sexual.
Ayer, La Gaceta dialogó con Esteban Salas, el abogado defensor del ex jefe de Policía Guillermo Valdevenitez, quien recientemente renunció a su cargo por una denuncia de acoso sexual en su contra, realizada por la oficial de “la garita del amor”, Lorena Romero.
Al respecto, lo primero que hizo Salas fue destacar que la denuncia “no es una denuncia”. “No tiene un tenor muy claro de en qué consta la presentación de esta oficial de policía. Se inicia como un habeas corpus, no dirigido contra una persona determinada, sino denunciando, por supuesto, seguimientos y un asedio policial, pero no dirigida en ningún sentido al defendido. A partir de ese habeas corpus aparece una nueva presentación que se titula ‘manifiesta’, tampoco dice denuncia. No tiene una forma jurídica bien definida”, comentó el abogado, señalando que la presentación de la inspectora Romero no está acompañada por ninguna prueba.
El día de ayer, Salas y Valdevenitez se presentaron ante el juez Correccional Marcelo Bustamante Marone. “Decimos que, a raíz de haber tomado conocimiento de que se estarían imputando hechos delictivos al defendido, Valdevenitez viene a designarme a mi como su abogado defensor”, contó Salas, quien ahora está a la espera de la decisión del juez.
“Primero me interesa ver cual es la postura que toma el juez ante la presentación de asignación de abogado defensor. Puede hacerme lugar o puede decirme que no porque no hay imputación. En caso de que sea así, lo que voy a pedir directamente es el archivo de la presentación. Y en el caso de que me hiciera lugar al rol de defensor, entiendo que hay que esperar que esta gente aporte las pruebas que dice tener de los hechos que se están investigando”, manifestó el abogado. “Como mínimo tendrían que presentarse a ratificar la presentación como para darle un poquito de fuerza”, agregó.
Finalmente, Salas señaló que a él no le consta que se haya solicitado la intervención de ninguna línea telefónica, y que Valdevenitez conocía a Romero por “razones netamente laborales”. “Lo que yo quiero aquí es limpiar mi buen nombre”, fueron, según el abogado, las palabras de Valdevenitez cuando lo contrató.