Bajo el sistema prestacional, los profesionales de la salud cobran por, valga la redundancia, cada prestación que realizan; mientras que con el sistema per cápita se cobra por paciente, sin importar la cantidad de veces que haya sido atendido. Esto puede significar una ganancia monetaria para el prestador en el caso de que el paciente se haga ver muy pocas veces por mes, pero no suele ser el caso debido a los intensos cuidados que necesitan los adultos mayores.
Este sistema fue impuesto el año pasado y en San Luis su efecto se sintió inmediatamente cuando el sanatorio Ramos Mejía dejó de atender a los afiliados de PAMI por casi un mes. Los kinesiólogos consultados por este medio comentaron que sus ingresos se redujeron, aproximadamente, en un 70% debido a la implementación del sistema per cápita.
Desde ese entonces, kinesiólogos agrupados de la provincia de San Luis, donde todavía no hay colegio profesional, se encuentran luchando para volver al sistema anterior. Así es como la última nota presentada a PAMI, a la cual todavía no han tenido respuesta, plantea la posibilidad de realizar un paro de atención a los afiliados de la obra social, el cual podría concretarse en las próximas semanas.
Por el momento, los kinesiólogos de la provincia siguen prestando sus servicios a los afiliados de PAMI, a la espera de que la obra social los llamen al diálogo, pero esto podría cambiar si no hay una respuesta favorable a sus reclamos.
