[dropcap style=”circle”]H[/dropcap]ace instantes, en una breve pero tensa sesión preparatoria, el concejal Javier Suárez Ortiz, de San Luis Unido, fue electo como el nuevo presidente del Concejo Deliberante. Suárez fue propuesto por su compañero de bloque Otoniel Pérez Miranda y electo por 8 votos afirmativos y 7 abstenciones. Los votos afirmativos fueron los de Pérez Miranda, el propio Suárez y de 6 de los 7 concejales del Frente Unidad Justicialista, ya que Daniel “el Negro” Ferreyra no acompañó al resto de su bloque.
O sea que, salvo Pérez Miranda, nadie del bloque de Suárez votó por él, lo cual claramente se enmarca en lo ocurrido en la sesión que se trató el último aumento del boleto de Transpuntano, cuando tras un empate en la primera votación estos dos concejales, que se habían abstenido, cambiaron su voto a afirmativo en la segunda. Si bien San Luis Unido (o sus encarnaciones previas como Avanzar y Cambiemos por San Luis) acompañó con su voto diferentes aumentos de boleto a lo largo de su historia, esta última votación marcó un cimbronazo del cual el bloque todavía no se ha podido recuperar.
El momento más tenso de la sesión fue cuando tomó la palabra el concejal Guillermo Araujo, también de San Luis Unido, y disparó que “no hay una propuesta salida del bloque” y que “llegar a la presidencia en este contexto, con el apoyo del oficialismo, por supuesto que no es gratis”.
Agustina Gatto, quien presidía provisoriamente la sesión le recordó en múltiples ocasiones a Araujo que esta parte la sesión preparatoria era sin debate ni oralización, pero el concejal opositor continuó con su discurso en contra de Suárez, apuntando a que cambió “el sentido del voto a último momento” e impidió que “se investigue una causa”. “En un año electoral en que, más que nunca, tenemos que estar libre de cualquier atadura”, añadió Araujo, a quien eventualmente le cortaron el micrófono, pero siguió hablando y explicando que “es por eso que no voy a acompañar”.
Una vez conducida la votación, Suárez tomó posesión del cargo y una de las primeras cuestiones que remarcó es que el Concejo “es una institución que no es de un partido ni de una persona”, y que “va a bregar principalmente por los intereses de todos los vecinos”. El flamante presidente del Concejo también señaló que “la mejor oposición es la que llega con políticas públicas a los vecinos” y aseguró que cree “en la política de concertación más que en una política de confrontación”. “A los vecinos no les importan los partidos políticos, les importa que lleguen las soluciones”, dijo Suárez.
En cuanto al resto de las autoridades del Concejo, Johana Sosa y Lautaro Ojeda se quedaron con las vicepresidencias primera y segunda, respectivamente. A su vez, hombres y mujeres de Unidad Justicialista serán quienes cubran las secretarías y prosecretarías legislativas y administrativas, por lo que Suárez, como pasó con Juan Domingo Cabrera en 2019, tendrá una mesa que no estará integrada por gente de su sector.