Su nuevo nombre será Cerámica San Luis y se estima que comenzará a producir dentro de 60 días.
Ayer a la mañana, el gobernador, Alberto Rodríguez Saá, recibió personalmente, de manos de la Justicia, el traspaso formal a manos del Poder Ejecutivo de la posesión de la planta de la ex cerámica San Lorenzo, que pasará a llamarse cerámica San Luis, ubicada en el parque industrial de Villa Mercedes. De ahora en más, la fábrica pasará a ser una cooperativa que quedará en mano de los 113 empleados que en enero de este año perdieron su fuente de trabajo.
“Es un suceso histórico en San Luis, donde el movimiento obrero, apoyado por el Gobierno provincial desde su lucha contra el desempleo y la pobreza, hoy tiene el privilegio de recuperar sus fuentes de trabajo”, dijo Juan Carlos Vega, secretario general del Sindicato de Ceramistas, quien lideró el bloqueo a la planta cuando los empresarios intentaron desmantelarla.
Por su parte, el vicegobernador, Carlos Ponce, desde su condición de conductor de la CGT de Villa Mercedes, calificó al acontecimiento como un hecho histórico para San Luis y el movimiento obrero. “Esto es nuestra lucha contra la pobreza y defendemos a capa y espada las fuentes de trabajo”, dijo el vice, quien también criticó duramente al Gobierno Nacional. “Es un modelo neoliberal que nos está llevando todos los días a perder empleos a través de la apertura indiscriminada de las importaciones y esta es la forma de darle respuesta a las medidas nacionales”, dijo Ponce.
Luego, el vicegobernador convocó a los legisladores nacionales, que en San Luis son oposición y oficialistas en el Congreso, a interiorizarse de esta situación y acompañar el reclamo por la vuelta de la promoción industrial a San Luis, porque “es una herramienta muy eficaz para combatir la desocupación y debe ser una política de Estado”.
El ministro de Medio Ambiente, Campo y Producción, Cristian Moleker, recordó el rápido trámite que tuvo el expediente iniciado en su cartera el 15 de marzo pasado para recuperar la fábrica, pocos días después que el gobernador propusiera una salida para los trabajadores despedidos.
“San Luis es una gran consumidora de cerámicos, en especial por los planes de viviendas del Gobierno, entonces si no los producimos en la provincia debemos importarlos; nuestro plan de lucha contra la pobreza se potenciará si podemos fabricar esto aquí, con mano de obra y valor agregado local”, destacó Moleker.
Finalmente, el Gobernador anunció que hoy se firmará un convenio con la flamante cooperativa para que en 60 días puedan comenzar a producir. Durante algunos meses el Gobierno los ayudará con capacitaciones, pago de sueldos, reequipamiento de la planta y acompañamiento en el proceso de comercialización.