“Es un paso hacia adelante. Creo que es muy importante el acceso a la información pública es un derecho que le pertenece a todos los vecinos de la ciudad. No es un acto discrecional del gobernante de turno ya sea el intendente, el gobernador. Todos los vecinos tenemos que tener la posibilidad de acceder a la información pública”, comentó el edil francisco Guiñazú, autor de la ordenanza.
El artículo que vetó el intendente era el primero de la ordenanza que es el que prohíbe el carácter secreto o reservado que pueden tener los decretos del Ejecutivo municipal.
Para rechazar el veto eran necesarios 10 votos y efectivamente se consiguieron. De los 11 ediles presentes en la sesión de ayer solamente Germán Ponce votó en contra. Un dato interesante es que la ordenanza se aprobó por la unanimidad de los votos de los ediles.
Otra cuestión en que golpea la gestión municipal fue la aprobación (10 votos a favor, uno en contra) de la resolución en la que se le manifiesta al municipio que debe publicar en el Boletín Oficial municipal para que se aplique la ordenanza que contempla el blanqueo de la relación laboral entre el chofer y el dueño del taxi.
Como fue rechazado el proyecto para derogar la ordenanza de blanqueo, la Municipalidad eligió no publicar la ordenanza para no aplicarla. La resolución aprobada por los concejales califica de inconstitucional la postura poncista y establece que si el municipio no publica la ordenanza en un plazo de cinco días hábiles se instruirá a la Asesoría Letrada para que tome medidas legales contra el Ejecutivo municipal para obligarlo a la publicación.