“Encontraron hormigas y moscas en el área de producción, como así también utensilios y otros elementos de trabajo muy sucios”, explicó el director de Bromatología.
La Dirección de Bromatología clausuró ayer una panadería ubicada en el barrio 171 Viviendas, manzana 335 casa 8, propiedad de Andrea Bizzotto, la cual presentaba un gran número de irregularidades.
“La inspección se originó gracias a la denuncia de un vecino y los inspectores constataron una absoluta falta de higiene, porque encontraron hormigas y moscas en el área de producción, como así también utensilios y otros elementos de trabajo muy sucios. La infraestructura del lugar, con evidente deterioro, no era apta para la elaboración de pan y tampoco tenía habilitación municipal ni las libretas sanitarias correspondientes. Todos estos hechos motivaron la clausura inmediata de la panadería”, dijo el director de Bromatología Horacio Elverdín.
“En algunos casos encontramos una negligencia total de gente que no se pone a tono con las normativas ni requisitos a cumplir, y no son conscientes de que están expuestos a que la inspección derive en una clausura. Cuando nosotros vemos que la infracción es de tipo administrativa, porque están en trámite para adquirir o renovar una habilitación o libretas sanitarias, nosotros emplazamos y no clausuramos. Tratamos de ser flexibles en ese sentido, pero cuando se trata de problemas sanitarios, que ponen en riesgo la salud de la población, la clausura es inmediata”, concluyó el funcionario municipal.