También todos los años, alguna de las figuras claves del oficialismo provincial es encarada por la prensa independiente para hablar del tema. En 2014 le tocó a Luis Martínez, quien reconoció que tomarse vacaciones que no les corresponden es una “tradición histórica” para el oficialismo provincial. Este año, fue el presidente del bloque Compromiso Federal, Gonzalo Estrada, a quien le tocó defender lo indefendible, luego de una sesión que contó con una bajísima asistencia oficialista y que en más de una ocasión se quedó sin quórum.
Tras aclarar que él no es el secretario administrativo ni “el control de presentismo de la Cámara”, el diputado intentó minimizar la cuestión, manifestando que esto también ocurre en muchos otros lugares. “Es el funcionamiento de las Legislaturas, las cuestiones son así. Contingencias del funcionamiento de las legislaturas, de todas”, comentó Estrada, obviando decir que la mayoría de las legislaturas tiene tres meses de vacaciones y no cuatro como la de San Luis.
Frustrado por las preguntas de la prensa sobre las ausencias dentro del oficialismo, relativas además a las sanciones que nunca se aplican o al hecho de que quienes faltan ni siquiera justifican su accionar, Estrada se limitó a responder cosas como “yo no puedo asumir la responsabilidad propia de cada legislador” y “yo no los voy a juzgar”.
Cabe destacar que entre las ausentes de ayer se encontraba la diputada Graciela Mazzarino, quien en todos los años que lleva como presidenta de la Cámara jamás ha aplicado sanción alguna a los diputados que se toman estas vacaciones ilegales.
