“En una charla que tuve con mi jefe, el director del Registro Civil (Gastón Tula Barale), que discretamente me hizo a entender que, por las publicaciones que yo había hecho, iba a tener problemas. A la tarde se hizo una reunión de acuerdo a lo que había pasado con mis publicaciones, y el ministro dijo que iba a decidir un nuevo destino para mi de acuerdo a lo que había pasado”, contó Gabriela.
La empleada pública cree que lo que, eventualmente, habría frenado su castigo fue que algunas radios de la ciudad levantaron un posteo que hizo en relación al apriete que sufrió e intentaron comunicarse con Gobernación y el Ministerio de Gobierno.
“Igual, yo se que, a la larga o a la corta, se van a tomar represarias en mi contra. Estas son las reglas del juego, pero les voy a dar pelea. Por mis compañeros, por mi dignidad, mi libertad de expresión y mis hijos”, dijo Damico, quien cree que eventualmente será castigada.
“Estamos en democracia, que nos cercenen por hacer una publicación en el Facebook, calculo que coarta nuestra libertad de expresión”, agregó Gabriela, quien asegura que en el Gobierno hay gente encargada de generar “Facebooks truchos para ingresar como amigos de los empleados y luego levantar la información o pasarla a los ministerios o Gobiernos”.
Por último, Damico exortó a sus compañeros a salir a la calle, recordando que, efectivamente, todos los aumentos que los empleados de la Administración Pública han conseguido ha sido gracias a los reclamos de docentes, médicos y policías. “Los empleados públicos tienen miedo de salir a la calle”, sentenció Gabriela.