Ante la llegada de Uber, taxistas presentaron una nota pidiendo llevar a $1.000.000 la multa por el transporte ilegal de pasajeros

[dropcap style=”circle”]E[/dropcap]ste jueves tomó estado legislativo una nota presentada por la Asociación de Titulares de Taxis solicitando una actualización del artículo 90 de la ordenanza 2555/94, para llevar el monto de la multa para los vehículos que presten el servicio de transporte “el servicio de transporte de forma ilegal” de 160 UMM (unidad monetaria municipal) a 64.000 UMM. Teniendo en cuenta que la UMM está en $15,87, esto significa que la multa pasaría de $2.539,20 a $1.015.680.

La nota fue presentada para expresar la preocupación del sector por el “arribo inminente de la plataforma de viajes UBER a nuestra ciudad”. “Es de público conocimiento los conflictos que ha ocasionado en distintas partes del mundo, por ser una empresa de capitales extranjeros que desembarca solo con una aplicación sin tributar sobre sus ganancias y negándose a cumplir cualquier legislación nacional provincial o municipal. El fin de esta empresa como ya lo ha hecho en distintos lugares es destruir el servicio de taxis, con ofertas de cobrar menos por viaje. Hasta que cae el taxi y después ellos manejan las tarifas a su gusto”, dice la nota presentada.

“Nuestra institución no se niega a la tecnología, al contrario, venimos trabajando con el gobierno de la provincia y municipio para lograr una plataforma con las mismas características que esta empresa ofrece. Con la gran diferencia que nosotros lo haríamos con autos debidamente autorizados por los municipios correspondientes”, agrega la nota presentada por la Asociación de Titulares.

Asimismo, cabe señalar que, en la nota en cuestión, el monto en pesos que figura es “$10.115.680”, lo que estimamos que se trata de un error de tipeo.

En este sentido, La Gaceta Digital dialogó con Juan Martín Divizia sobre esta nota y la polémica que ha generado el anuncio de la llegada de Uber, la cual ya cuenta con un gran apoyo de muchísimas personas a través de las redes sociales. En nuestra charla, el concejal manifestó su apoyo al sector del taxi, pero señalando que el servicio se ha quedado en el tiempo y necesita modernizarse.

“Es un sistema, como vengo diciendo, muy tradicional, que hace mucho tiempo trabaja, es un oficio que mucha gente tiene. Hay gente que ya está por jubilarse laburando de esto y no sabe hacer otra cosa porque es su modo de vida. Por otro lado, hay una demanda social tremenda. Vos lo ves del lado de los comentarios en redes sociales que por ahí son índices, por ahí no; pero nuestra familia, nuestro compañero de trabajo, mensajes por WhatsApp, todo el mundo está pidiéndonos que llegue Uber de alguna manera. Y yo lo que trato de hacer es una traducción de esto. Lo que me están pidiendo es una mejora en el servicio”, remarcó el concejal. “Lo que sí estoy diciendo es que hoy el taxi está muy lejos del usuario”, añadió.

“¿Qué es lo que trae Uber? Un contacto directo casi. Donde estés, primero, sabes cuánto te va a salir el viaje. Sabes cuánto te va a demorar en el viaje y quién te va a llevar. Yo mido 1,92 y puedo elegir que venga un vehículo más grande, más confortable. Tenés la posibilidad de un tracking, que mandás la ubicación en tiempo real a otra persona. Tenés la posibilidad de grabar la conversación que tenés con el conductor. Tenés la posibilidad de evaluar el tipo de conducción, si el vehículo estaba limpio o no. Yo me subí a Uber en Buenos Aires y el vehículo no está en condiciones, la conducción es peligrosa, el vehículo se mueve para todos lados, hace ruido, la higiene del vehículo no es la mejor; pero tenés la posibilidad de evaluarlo. Y yo me subí a taxis de San Luis que son último modelo, que están impecables, que el conductor es muy amable, que te convida un caramelo, que la charla es amena, que no tiene olor a cigarrillo, un montón de cosas. Entonces no existen las generalidades. Depende más del conductor que del servicio en general”, continuó, haciendo un panorama de ambos servicios.

En este sentido, Divizia hizo hincapié en que “el servicio de taxis de San Luis necesita modernizarse” y “usar una aplicación” y, sin pelos en la lengua, dijo que el sector se ha resistido a este cambio por años. “No la quieren usar. ¿Por qué? Porque dicen que los van a controlar, porque van a gastar datos, no sé por qué… En definitiva, yo pienso que el Estado puede intervenir, puede acompañar, puede ayudar, pero no puede imponer estas cosas. Tiene que surgir de los taxistas y ellos tienen que decir, ‘che loco, queremos hacer esto, ayúdennos, no tenemos los fondos, no tenemos la manera, la herramienta’”, consideró el presidente de la comisión de Transporte.

“Pero a mí me enorgullecería que Uber se tenga que ir a San Luis porque hubo una aplicación local que la armaron los taxistas, para los taxistas, que funciona bien y que le hizo mal a Uber y funcionó mejor que Uber”, continuó Divizia, renovando una propuesta que ya realizó antes.

Con respecto a este pedido de elevar la multa por transporte ilegal, el concejal consideró que “no es la solución”. “No es tan fácil modificar un código de falta. Más allá de lo que yo piense, hay que ver la parte técnica, si se puede, que no quede desbalanceado. Además, ¿la municipalidad va a tener la obligación de salir a cazar Uber en la ciudad? Con esto vamos a generar una guerra entre taxis y Uber y el problema de los usuarios no lo vamos a solucionar. Hay que trabajar más seriamente”, consideró.

En este contexto, La Gaceta Digital consultó a Divizia si el Concejo Deliberante no se durmió con este tema. Recordemos que, en 2016, cuando Uber desembarcó en Buenos Aires, se habló del tema en el Concejo local, pero quedó en la nada.

“¿Sabés dónde se durmió el Consejo Deliberante? En no modernizar el servicio de taxis. No es que no lo hablamos. El problema, ¿sabés cuál es? Es que vienen 5, 6, 7 asociaciones distintas y todos opinan distinto. Entonces yo, como concejal, no le puedo imponer un taxi que haga algo que no quiera hacer. Va a ser un fracaso. Ahora nos agarró a todos el apuro”, respondió el edil.

“Tenemos que salirnos del tradicionalismo, ayudar a la nueva tecnología y solucionar los problemas de los usuarios. Me parece que es lo más lógico. No resistirnos por resistirnos. Tomemos las buenas prácticas de Uber”, dijo Divizia, llamando al trabajo en conjunto para sacar adelante una aplicación local. “La otra posición es tomar lo que hizo Mendoza, que es legislarlo, reglamentarlo. Bueno, habrá que ir viendo y hablar con los taxis. Pero, como te digo, se tienen que comprometer a laburar, a mejorar, porque la realidad es que el servicio necesita modernizarse. Si te pones a fijar el servicio de hace 10, 15 años atrás, no ha cambiado nunca”, agregó.

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