Los primeros reportes llegaron cerca de la medianoche del jueves, dando cuenta del desborde del río de Potrero de los Funes, por lo que, primeramente, hubo que evacuar a tres familias, que se alojaron en casas de familiares, vecinos o amigos; y a 16 personas más, en su mayoría turistas, que pasaron la noche en el polideportivo municipal.
“La constante lluvia provocó que el río de la localidad elevara su caudal de agua y que algunas viviendas que se encontraban en la costanera o la cola del dique resultaran inundadas”, manifestó Omar Terc, jefe de San Luis Solidario, el pasado viernes 14.
Por su parte, el intendente de Potrero, Daniel Orlando, informó que se llevaron a cabo tareas como el levantamiento de postes de alumbrado caídos y ramas, brindando además asistencia con colchones, frazadas y alimentos no perecederos para los afectados.
Ese mismo día, viernes 14, Terc informó que hubo que cortar la ruta que atraviesa la Quebrada de los Cóndores, “por una cuestión preventiva por el derrumbe de la montaña y por un posible desbordamiento del río del lugar”.
Por el lado de Juana Koslay, la Dirección de Prensa informó que hubo familias que debieron ser evacuadas al complejo deportivo Ave Fénix, pero nunca se precisó el número exacto. Además, hubo que montar un operativo especial, montado por bomberos voluntarios de Potrero, para rescatar a tres jóvenes de Juana Koslay que justo habían decidido ascender al Salto de la Moneda.
A su vez, en la Capital provincial, San Luis Solidario informó que las zonas más afectadas fueron los barrios 9 de Julio, Rawson, Monseñor Di Pascuo, Aeroferro y San José. Allí, se repartieron colchones, frazadas, nylon y ayuda humana para el apuntalamiento de algunas casas. Según los informes, solo una familia, constituida por padre, madre y seis hijos, debió ser evacuada y refugiada en el Velódromo Provincial.
De acuerdo a Defensa Civil de la Municipalidad de San Luis, los barrios más afectados fueron los anexos del Eva Perón, 1º de Mayo, 9 de Julio, Manuel Lezcano, 109 Viviendas y Rawson, entre otros. Sin embargo, la dirección municipal no tuvo que realizar ninguna evacuación, ya que “los vecinos, en general, prefirieron quedarse en sus domicilios por temor a sufrir consecuencias por la inseguridad”.
También el mismo viernes, la gerencia operativa de San Luis Agua comunicó que, debido a las abundantes precipitaciones, el servicio de los acueductos Suyuque, Los Molles, Huascara y Los Canales debió ser suspendido por un par de días, a raíz de las roturas ocasionadas por las crecidas. En tanto, el acueducto de Potrero de los Funes no funcionará el día de hoy, lunes 17, ni mañana “por tareas de mantenimiento en la línea y cambio de válvulas”.
Ya el sábado 15 se restituyó el paso en la Quebrada de las Cóndores y todas las familias evacuadas retornaron a sus hogares. Sin embargo, ese día se registraron daños en el antiguo templo de Santo Domingo, donde actualmente funciona el programa San Luis Libro. “Allí se produjo el estancamiento del agua sobre el techo de la construcción que derivó en el derrumbe de una de las paredes laterales. Estuvieron trabajando principalmente los cuerpos de bomberos voluntarios y oficiales de San Luis”, informó el Gobierno.
Por último, el domingo, el Estado provincial declaró que “la situación es de normalidad en toda la provincia”. También se destacó la ayuda brindada por ONGs como las fundaciones Funisa, Corazón de Búfalo, la asociación Todos Juntos por Malvinas y el centro de ex combatientes, quienes prestaron servicios “de modo permanente”.