[dropcap style=”circle”]E[/dropcap]ste jueves se cumplieron seis meses del crimen de la docente Mónica Ramos, quien fue asesinada de 20 puñaladas y luego su casa fue incendiada supuestamente para “tapar” pruebas. Uno de los hijos de Ramos reclama el esclarecimiento del hecho y celeridad en la investigación.
“Realmente queremos saber qué paso y que se esclarezcan los hechos. Todavía no nos han podido dar una explicación más allá de la persona detenida. Nos nos han podido dar una explicación sobre el móvil o porqué pasó esto. Nadie puede creer que le hicieran esto porque mi mamá era una persona hermosa”, expresó Martín Rodríguez en declaraciones al programa Telemañana de Carolina Cable.
A los cinco días del asesinato de Ramos, un hombre fue detenido. Se trata de Héctor Federico Núñez (32), empleado de una fábrica, cuya detención se hizo en calle Ayacucho 322. Núñez fue procesado y se le dictó la prisión preventiva por parte del juez de Instrucción N° 1 de la Primera Circunscripción Judicial, Marcos Flores Leyes.
“El móvil del robo cuesta que cierre. Por eso el pedido es realmente que queremos saber la verdad. No nos alcanza con una persona detenida. Consideramos, bajo la lógica, que existieron una o más personas que oficiaron de entregadores, de facilitadores. Creemos que hay una planificación importante detrás de esto”, consideró Rodríguez.
El joven considera que los delincuentes conocían la rutina de Ramos, su profesión, el auto que usaba y las cámaras que había en las cercanías de su domicilio de Belgrano al 110.
“Nadie todavía me puede decir si hubo una relación de vínculo en cuanto a la persona que facilitó la información, pero evidentemente había un conocimiento previo. No sé si es por planificación o porque había un vínculo”, manifestó el hijo de Ramos.
Como se mencionó el principio de la nota, luego del asesinato de la mujer, la casa fue incendiada. La Justicia presume que fue con el objetivo de encubrir pruebas. Rodríguez contó que con el incendio se dificultó determinar si faltaban bienes o no.
El joven consideró que a seis meses del crimen no pueden seguir “las irregularidades” en la investigación, ya que todavía no se hizo el peritaje de las uñas de Ramos, y que todas las semanas debería avanzar la causa.
“Detrás de esto no hay un expediente, hay una familia. Que este tiempo perdido que se transforme en celeridad para el futuro”, reflexionó el hijo de la docente.
