[dropcap style=”circle”]E[/dropcap]l perito encargado de determinar las causas del derrumbe del edificio de San Juan y Aristóbulo del Valle, que produjo la muerte de dos personas el lunes pasado, presume que la estructura estaba colapsada por las reformas que se le hicieron a través de los años sin la debida supervisión profesional.
El ingeniero Gabriel Gutiérrez contó que en el edificio de dos plantas funcionó en primer lugar la panadería Gitto, luego como un pelotero, después como un taller mecánico y hasta antes de derrumbe se hacían arreglos para montar una concesionaria de autos.
Gutiérrez explicó que en la construcción hay dos tipos de muros. Los portantes que son los que soportan cargas de la estructura y los no portantes que no las sostienen. Si se demuele un muro portante se dejan al aire las cargas y la estructura eventualmente cae. “En la época del taller se eliminaron columnas para que los autos ingresaran” y semanas antes del derrumbe, el edificio tenía “muchas fisuras”.
“Al no haber inspecciones técnicas de profesionales, maestros mayores, arquitectos, ingenieros y se construye libremente, desgraciadamente, se pueden producir estos hechos. Hay que determinar bien el hecho de porqué sucedió y eso va a ser la semana que viene con el peritaje”, aseguró Gutiérrez. Entre el jueves y el viernes tendría terminado el estudio.
Como las diversas reformas del edificio fueron hechas sin supervisión técnica ni autorización del Municipio capitalino, solamente hay un plano que data de 1970, sobre una ampliación que se hizo en la parte posterior donde funcionaba una rotisería.
“La estructura no la conocemos cómo era al inicio ni cómo fue cambiando. Lo que sí nos informan la última gente que estuvo que quiso hacer una concesionaria. Estuvieron seis días trabajando. Pintando y tapando fisuras, ya estaba colapsada la estructura. Si hubiera habido un profesional idóneo hubiera dicho: ‘señores, esto se puede caer, apuntalemos’. Lo único que hicieron fue revocar las fisuras en la mampostería”, expresó el ingeniero.
El ingeniero estima que entre el jueves y viernes de la semana que viene tendrá terminado el peritaje y tendrá cabalmente la causa del derrumbe que se cobró la vida de dos personas.
El próximo lunes se demolerá lo que queda del edificio por razones de seguridad.
