[dropcap style=”square”]D[/dropcap]esde hace años, el Gobierno provincial se maneja con la ley permanente de presupuesto que establece que los presupuestos anuales no deben superar el 50% de gastos corrientes. La premisa del presupuesto equilibrado no se cumplió en la ejecución presupuestaria 2018 por la crisis económica, según admitió un funcionario del Ejecutivo. Los gastos corrientes aumentaron más del 12% el año pasado de lo que indicaba el presupuesto.
“El aumento salarial, la inclusión de toda la gente del Plan de Inclusión dentro del escalafón general, y los tarifazos que ha habido por el Gobierno nacional, hacen que los gastos corrientes hayan sufrido un aumento con respecto a los recursos muy dispar y eso dificulta el cumplimiento del 50% de inversión en gastos de capital con respecto a los gastos corrientes. Es el motivo por el cual la ejecución del presupuesto 2018 arrojó más gastos corrientes que de capital”, explicó el contador general de la provincia, Daniel Marone, luego de la reunión que mantuvo ayer con diputados de la Comisión de Hacienda para responder un pedido de informe.
La ejecución presupuestaria de 2018 arrojó un 62,63% de gastos corrientes y un 37,27% de gastos de capital.