Lo manifestó el diputado Alejandro Cacace respecto al nuevo revés judicial que no oficializó su lista para las PAS dejando solamente la que encabeza el “Pupa” Agúndez en el marco de la interna del frente Avanzar y Cambiemos por San Luis.
En el marco de la interna del frente Avanzar y Cambiemos por San Luis por las Primarias Abiertas y Simultáneas (PAS), la Justicia electoral provincial oficializó ayer la lista encabezada por Jorge “Pupa” Agúndez, pero no lo hizo con la que lidera el diputado Alejandro Cacace por no presentar las boletas a pesar de la intimación. Como quedó una sola lista, las PAS del próximo domingo no tienen sentido.
“Imposible para nosotros participar el domingo. Es todo un armado para interferir en la selección de nuestros candidatos. A esta altura no sabemos lo que el Gobierno quiere hacer, pero ha dejado una sola lista en competencia, igualmente sigue los pasos como para hacer una elección el domingo, lo cual sería un completo show para dar legitimidad a una elección de la que no participa ningún partido”, manifestó el diputado.
Además, consideró como inconcebible que a pocos días de las elecciones le pidan que presenten las boletas.
Para Cacace la estrategia de la Justicia Electoral provincial es dilatar la tramitación del expediente para no resolver la causa con el objetivo de que no se pueda apelar en el fuero nacional. “No tenemos justicia en la Justicia de San Luis donde estamos siendo manejados por Lilia Novillo y el juez Ruta”, sentenció el abogado.
La Gaceta preguntó al legislador si cree que quedará fuera de la elección de octubre. “Si los Rodríguez Saá nos proscriben, sí. Creo que es grave eso porque no es una competencia limpia entre los dos frentes. Nos están introduciendo una serie de obstáculos”, respondió.
Hasta el momento, lo concreto es que la Justicia Electoral dispuso que a nivel provincial la lista “Comité Presidente Raúl Alfonsín” es la única del frente Avanzar y Cambiemos por San Luis y no hay motivo para la realización de las PAS del domingo. Todo parece indicar que el culebrón político está lejos de terminar.